Este artículo de hoy lo quiero dividir en dos partes claramente diferenciadas. La primera será una crítica de la película Star Wars: El despertar de la Fuerza y la segunda parte una crítica sobre los cines donde la vimos. Ojo que en la primera parte puede haber spoilers sobre la trama.
Una franquicia millonaria que hay que seguir “ordeñando”
Como todo fan de la saga, esperaba con ganas el estreno de este episodio VII, desde que supe que J.J Abrams se ponía al mando del comienzo de una nueva trilogía y para resumir mucho, me ha decepcionado a medias.
Me explico: Si eres muy fan, como yo, te habrás dado cuenta que esta nueva entrega se parece sospechosamente a la primera que se hizo allá por 1977. El episodio IV.
Encuentra las diferencias
Para refrescarte la memoria y que veas las similitudes. En aquella, el imperio asaltaba una nave diplomática en que se sospechaba que había unos planos de la estrella de la muerte. La princesa Leia mandaba un mensaje a través de un robot muy carismático y de color azul, con forma de papelera.
En el episodio VII, una nueva organización llamada Primera Orden, asalta un poblado porque sospechan que hay unos planos que revelan el escondite de Luke Skywalker. Estos son introducidos en un robot con forma de pelota de tenis (lo de carismatico esta aún por ver).
En el episodio IV aparece un ser malvado, con poderes mentales, que se oculta tras una máscara.
En el episodio VII aparece un ser malvado, con poderes mentales, que se oculta tras una máscara.
En el episodio IV aparece un muchacho que vive en un planeta desértico, con inquietudes y ganas de conocer la galaxia.
En el episodio VII aparece una muchacha que vive en un planeta desértico, con inquietudes, que se gana la vida buscando chatarra.
¿Es necesario que siga? ¡Joder! ¡Si hasta en esta sale una cantina!
En fin, me da a mi que se ha querido arriesgar poco y se ha ido a lo seguro. ¿Entonces, es todo igual que en el episodio IV? No, todo todo no, pero casi. La historia se supone que es una continuación de la primera trilogía; 30 años después de la victoria de la Alianza sobre la segunda estrella de la muerte, la galaxia continua aún en guerra. Ahora no hay estrella de la muerte, hay planeta de la muerte. Y así, con todo.
¿Pero, merece o no la pena ver Star Wars: El despertar de la Fuerza? Sí, merece la pena, porque este tipo de película se disfruta más en un cine, viendo a gente disfrazada (sobre todo muchos niños) y por el 3D, que lo han mejorado un montón y está realmente bien. Pero eso sí, no te esperes una maravilla. Ahora que, lo prefiero mil veces al episodio I, que resultó muy decepcionante.
Hasta aquí mi sesuda crítica crítica de la película. Ahora la segunda parte.
Como arruinar una noche por culpa de una mala planificación
Si me lees habitualmente, recordarás la amarga queja que hice de los cines Capitol. Pues este viernes pasado terminaron de lucirse.
Compre las entradas en cuanto me enteré que se ponían a la venta, y como me gustan mucho los cines de la Gran Vía (los pocos que aún quedan), me decidí precisamente por el Capitol.
Llegamos con suficiente tiempo y con la entrada en la mano y lo primero que vemos es un tapón en la entrada del cine. No una fila, no. Tapón directamente.
Bueno, paciencia: es normal, un estreno, mucha gente con ganas, el centro de Madrid, Navidad…
Pues todo se debe a una pésima organización por parte del cine a la hora de gestionar el acceso y el reparto de gafas para ver la proyección en 3D.
No se pudo hacer peor. Nada más entrar y revisar tu entrada, tenías que volver a hacer cola para que te diesen tu gafa y volviesen a revisar la entrada. Vale que el hall del cine no es inmenso, pero había suficiente espacio como para poner la entrega de gafas un poco más allá. Y si no, ¿Por qué no te dan las gafas al acceder al cine en lugar de tener que hacer dos colas? Yo no lo sé.
Pero eso no es todo, según estamos esperando, veo que empiezan con los trailers y ¡Empieza la película! Pero vamos a ver, es la última sesión de la noche, después no hay nada más, ¿No hay nadie que pueda llamar a la cabina de proyección y retrasar la película unos minutos a que todo el mundo haya entrado y esté sentado en su sitio? Esa es otra, con los nervios, no recordaba la distribución de los asientos y no conseguíamos encontrarlos. La película empezada, el cine a oscuras, la gente entrando y yendo de un lado a otro como pollos sin cabeza.
Total, que nos sentamos en los primeros asientos que vimos vacíos, y menos mal que no se llenó el cine, sino les monto el pollo allí mismo.
Eso sí, a la salida pusimos una hoja de reclamaciones, como debió hacer mucha gente.
Por mi parte, no volveré al Capitol en mucho, mucho tiempo.
Alba
23 de diciembre de 2015 at 10:06
No hay mucho spoiler en tu crítica, me esperaba más jajajaja. La película a mi si me ha gustado, pese a todo lo anterior y al momento de \” me quedo sin sangre en las venas\”….
En cuanto al cine, NUNCA MAIS!!!!!!!!!!! cuando llegamos nos encontramos con que las mismas entradas las teníamos 3 grupos de personas!!!!! Increible, no he visto peor organización en mi vida.
araque
23 de diciembre de 2015 at 10:25
He procurado ser comedido con el argumento, pero por si acaso alguien se ofende yo siempre aviso.
Es que no se pueden hacer peor las cosas. ¿Y de los asientos qué me dices, cómodos?
Oscar I.E.
14 de marzo de 2016 at 09:38
Ya se sabe como son los cines antiguos. Las butacas no brillan especialmente, aunque en algún que otro caso sufrieran una \”reforma a la española\”…
En cuanto a la película confieso que me ha gustado. Quizás por su parecido con la primer trilogía y por tener mayor diferencia con la segunda.
Es sabido que la primera parte de la historia, los tres primeros episodios, no gustaron tanto a pesar de las mejoras tecnológicas, que son impecables. Pero ya lo dijo G. Lucas en su momento, decidió hacer los episodios centrales de la historia en primer lugar por que comercialmente son más atractivos para un público más amplio; y no me extraña, sabiendo lo simples que suelen ser los argumentos de Hollywood acorde con el intelecto más generalizado del público de USA.
Así que creo que Disney ha tomado la mejor decisión. Por un lado hacer que se parezca más a esa primera trilogía. Es evidente que era lo mejor, ya que comercialmente asegurarían una mejor satisfacción de los fans y por otra daban una continuidad más creible a la historia.
Esperemos que no decaigan en su empeño. A pesar de ser de Disney, el resultado parece bastante bueno. No me creía que la gran productora de Mickey Mouse pudiera hacerlo tan bien, al menos no huele a un típico producto suyo, sino que parece manufacturado realmente por la factoría Lucas.
Fiebre
8 de septiembre de 2016 at 21:11
Yo vi la pelicula en Blurai en mi casa, tengo una pantalla de 55 \” serie 8000 con un sistema dolby digital surround 7.1, pero con cable, el wifi me da mal rollo estoy convencido que puede producir jaqueca y esterilidad. Ademas no hay nada mejor que hacer un pequeño break en medio de la pelicula para tener unas placenteras caricias con la txurri.
Hace mucho que no voy al cine, sobretodo porque me gusta mucho acompañar la película con una buena racion de muslos de pollo (8-12 muslos) y ketchup. El cine al igual que los videoclubes forman parte de esos maravillosos años que guardan tanta nostalgia ,pero hay que ir dejando paso al futuro… como diria nuestro querido amigo Friedrich Wilhelm Nietzsche desde su pequeño pueblo de Rocken en la antigua Prusia \”El cine ha muerto, viva el supercinexin!!\”