Llevo más o menos un mes con la pulsera inalámbrica de actividad Fitbit Charge HR y te quiero contar mis impresiones.
Hoy día, pulseras de este tipo se cuentan por docenas y si añades los nuevos relojes inteligentes, el decidirse por uno u otro se nos puede hacer muy complicado. Una pista: no existe la pulsera/reloj definitiva; lo que le puede faltar a una lo tiene la otra pero a su vez aquel modelo tiene un color más chulo o el precio es demasiado caro.
He leído mucho sobre este tipo de gadgets y me decidí por este modelo por la sencilla razón de que me pareció el más completo.
Comenzaré enumerando sus características:
- Ritmo cardíaco. Obtiene las pulsaciones en tiempo real y continuo. Se puede establecer unos rangos de máximos y mínimos.
- Registro de ejercicio y actividad. Es el punto fuerte de la pulsera. Cuantifica los pasos dados, la distancia, las plantas subidas; se le puede indicar el comienzo de una actividad física específica, calorías quemadas, minutos de actividad, sueño.
- Indicador automático de sueño y alarmas. Puedes programar la hora a la que te despiertas durante la semana (de forma independiente cada día) y una vibración en el brazo te dirá que es hora de despertarse. Puedes comprobar las horas de sueño, el tiempo que te despiertas por la noche y el rato que estás “inquieto”.
- Según el fabricante, la batería dura 5 días, aunque realmente no va más allá de 4.
- Tiene indicador de llamadas. Si lo llevas conectado al móvil por bluetooth y te llaman, la pulsera vibra y aparece el nombre (o número) de la persona que llama. Pero no puedes contestar con ella. A mi me viene de maravilla porque muchas veces no te enteras cuando te están llamado.
- Calcula la calorías consumidas gracias a una gran base de datos de alimentos. Pero hay que hacerlo a mano.
- Y tiene reloj!
Como dije, llevo un mes con ella y estoy contento. Me sirve como aliciente para superar los retos que me propone, es sencilla de usar y después de un tiempo te olvidas de que la llevas puesta. En cuanto a la calidad; la correa lleva un cierre clásico lo cual me gusta porque da sensación de seguridad, no tanto así el que parezca de plástico, aunque el material se ve resistente.
Se recomienda descansar de la pulsera de vez en cuando y se puede limpiar con un paño húmedo. En cuanto a los puntos débiles que yo he observado, son los siguientes:
- Aunque es resistente al sudor y a las salpicaduras, no te puedes duchar ni nadar con ella.
- Es algo rígida en la parte superior.
- No puedes cambiar la pulsera y, aunque hay varios colores anunciados, yo tuve problemas para conseguir el azul y al final tuve que optar por el morado. En la tienda de la web solo hay negra y morada.
- Si subes una cuesta más o menos pronunciada cuanta como subir pisos y eso no parece muy lógico.
- Tiene un conector para cargar propio, es decir, que si te lo olvidas o lo pierdes, no te vale uno cualquiera (como podría pasar con un móvil).
- No permite cancelar la alarma (a no ser que lo hagas en la aplicación) si te despiertas antes de la hora.
En resumen, ha cumplido mis expectativas sobradamente.
