Desde que leí un artículo en prensa acerca de la apertura de este nuevo restaurante en Madrid no he parado hasta visitarlo.
Se trata del Chuka Ramen Bar, situado en la calle Echegaray nº 9 de Madrid. El primer Ramen Bar de Madrid (o al menos eso dicen), que traslada la filosofía de este plato a la capital.
No puedo comparar, nunca había comido Ramen, pero si el que te hacen en Japón es como este, ¡Alabado sea!
Y es precisamente por eso por lo que tenía ganas de probarlo. El sitio es pequeño, acogedor por lo que es conveniente llegar pronto para coger sitio, ya que se llena con facilidad. Fui con un grupo de amigos y por suerte salimos en cantados.
El camarero resultó atento y nos explicó lo que llevaba cada plato y como es un Bar de Ramen, este es el plato principal. El resto de ofertas son más bien para acompañar o compartir.
Tiene 3 tipos de Ramen:
- Shoyu: Fideos, panceta huevos y cebolleta china.
- Miso Dashi: Sopa con miso, setas y albóndigas vegetales.
- Hiyashi Chuka: fideos, salchicha picada, brotes y anacardos. Este último es el único que no lleva caldo.
Pedí el Shoyu y probé del Hiyashi. El resultado no podría ser más satisfactorio. La pasta al dente, la carne se deshacía y el caldo estaba sabroso. El Hiyashi tenía un toque picante y los anacardos ligeramente garrapiñados le daba un toque agridulce muy sabroso. De bebida compartí una cerveza Ginga Kogen.
Para el postre no hay elección posible por que solo tienen uno, una especie de donut coronado por un poco de helado. El donut es un pastel de arroz con glaseado de lima y el helado es de limón. Merece la pena probarlo.
¿Hubo parte negativa? La verdad es que sí; quizá los taburetes de las mesas altas no sean los más cómodos del mundo y la falta de respaldo hace que pierdas una referencia para permanecer recto. Y luego está la parte ruido. Al llenarse el local, tal y como somos en España, los gritos al hablar se hacen presentes (yo incluido) y al cabo de un rato puede resultar molesto.
Tocamos a 16€ por persona, precio bastante razonable.
